¿Sabías que 1 de cada 3 casos de dificultades de aprendizaje puede estar relacionado con un problema visual no resuelto?

La visión es un proceso complejo y fundamental en el aprendizaje escolar. Más de dos terceras partes de la información que reciben los estudiantes llegan al cerebro a través del sistema visual.

A mi hijo o a mi hija no le gusta leer

Si el sistema visual no se desarrolla adecuadamente, se pueden provocar interferencias en el proceso de aprendizaje. Una de las primeras manifestaciones en la edad escolar es la carencia de interés por la lectura puesto que el niño no es capaz de asimilar correctamente la información visual que recibe. Casi el 1 de cada 3 niños manifiesta que se cansa al leer. La cifra aumenta a 1 de cada 2 en aquellos niños con bajo rendimiento escolar.

Síntomas

Otros síntomas de alerta son desde errores al copiar palabras de la pizarra, dolor de cabeza, ojos llorosos, escozor, parpadeos constantes y sensibilidad a la luz hasta acercarse mucho al papel, necesitar el dedo como indicador al leer, entrecerrar los ojos para mirar de lejos o de cerca y errores al calcular distancias. Por eso, la escuela es un buen lugar donde detectarlos y posar remedio y se recomienda hacer revisiones completas a partir de los 3 años al menos una vez al año.

Importancia de las revisiones visuales periódicas

Es imprescindible realizarse revisiones periódicas de salud en general y de la visión, en concreto. Esto es todavía más importante en el caso de los menores.

Es alarmante que sólo 1 de cada 4 familias llega a sospechar de la existencia de un problema, cuando uno de cada dos niños puede sufrir alguna disfunción visual. Se tiene que tener en cuenta, además, que como antes se detecte, se obtendrán resultados más óptimos.

Además, es importante destacar que algunos casos de niños con problemas académicos que se levantan continuamente de la silla o que suelen distraerse con facilidad suelen confundirse con TDAH o déficit de atención, cuando en algunos casos puede tratarse de un problema de visión próxima.

¿Cuál es la tarea del optometrista?

Lo que hace un optometrista ante un problema de aprendizaje es investigar, detectar y diagnosticar las dificultades escolares que están causadas directamente por una carencia de las habilidades visuales necesarias para la lectoescritura y proponer los tratamientos óptimos.

Por todo ello, el COOOC lucha para entrar a formar parte los EAP, que son equipos de asesoramiento y orientación psicopedagógica que apoyan al profesorado y a los centros educativos en la respuesta a la diversidad del alumnado y en relación a los alumnos que presentan necesidades educativas especiales, así como a sus familias. Actualmente, están formados por profesionales de la especialidad de psicología y pedagogía, trabajadores y trabajadoras sociales y fisioterapeutas.

¿Quieres hacer la campaña Visión y Aprendizaje en tu escuela o el colegio de tu hijo o hija?